_MG_8789En este bloque se agrupan lo que he dado en llamar las reglas del juego organizacional, una invitación a mirar distinto para ver mejor.

De lo inhabitual: El éxito o fracaso empresarial está determinado por el impacto de lo aparentemente excepcional y raro. Las teorías que hablan de las organizaciones dejan fuera todo aquello que siendo abundante y aparentemente inhabitual determina de manera definitiva el devenir de una empresa. No hay perfección en las organizaciones y sin embargo se hace creer que existen liderazgos perfectos, talento puro, comunicaciones culminantes, coaching impoluto y toda una gama de iniciativas de un mundo feliz e inexistente.

De lo ausente: Consiste en registrar lo que no ocurre, lo que no hay, lo que no se hace o no se dice. Consiste en centrarse en lo ausente. La presencia de la ausencia hace real a lo ausente, y ese no estar es lo que en muchas ocasiones desencadena el fracaso en las organizaciones.

De la contracara: aborda la contracara de las cosas, la contraportada de los titulares, el reverso de lo que se dice, el envés del trabajo. Detrás de toda propuesta de desarrollo organizacional y de impecables procesos de recursos humanos hay un intento desesperado por decir lo que se espera que se diga, proponer lo que se intuye desea ser oído, anunciar lo que se quiere escuchar, quedar bien. Esta es la contracara del acervo profesional: salir vivo.

De la simulación: pone la mirada en quienes saben que en un plan supuestamente ordenado, profesional y brillante se mostrará una parte de la realidad, la que se puede contar, y no la otra, la que realmente se hará. Todo plan de recursos humanos presentado en un Power point es una fotografía nítida de lo que nunca ocurrirá. La simulación esconde comportamientos que el código de ética censura pero que se darán a sus sabiendas, que se harán en sus escondidas, que se reforzarán a sus anchas.

_MG_8418EDITADADel imperio de lo inevitable: Los procesos de recursos humanos, estén o no programados, son inevitables, comandan la realidad empresarial como escuadrones desgobernados. La comunicación, la estructura, el dimensionamiento, la selección, la formación, la gestión del rendimiento, el desarrollo de carreras, la retribución… son actividades inevitables estén o no formalizadas, estén o no precedidas del pistoletazo de salida de un proceso orquestado.

De la invasión de lo inesperado: Las decisiones más importantes en las organizaciones se dan en lugares inopinados, momentos imprevisibles, horario impropio o en compañía de seres inauditos. Lo mejor y lo peor de una empresa se pergeña de manera extraoficial y fuera de todo procedimiento predecible. A partir de esta realidad debemos replantearnos los escenarios que necesita una organización para promover de las personas lo mejor de sí mismas.

Del desaprendizaje: La aplicación de este listado de aprendizajes no autorizados deriva momentánea e inevitablemente en un proceso progresivo de desaprendizaje. Y lo cierto es que el hecho de que pasado el tiempo el bagaje aminore, el conocimiento achique y el saber afloje no es plato de buen gusto. Pero esta aceleración negativa del saber es el trance que conviene pasar si queremos crear una mirada nueva y renovada acerca de lo que son y necesitan las organizaciones para adaptarse a la realidad global en la que ya están inmersas de manera irreversible.